Cómo enfrentar el rechazo: lo que NO debes hacer

Enfrentar el rechazo no es fácil y muchas mujeres no pueden aceptar el hecho de que su pareja les haya dejado.

No pueden asimilar que es definitivo y piensan que tienen que hacer algo para que él cambie de opinión. Piensan que pueden hacer algo, que tienen que luchar por él, que no pueden simplemente darse por vencidas.

Lo que pasa es que cuando una mujer lucha por un hombre, normalmente acaba fracasando. En raras ocasiones puede ocurrir que él se quede con ella, pero no lo hará porque la quiera mucho, sino por la pena de ver a la persona, amada durante tanto tiempo, en un estado tan triste y desesperado.

¿Quieres que él esté contigo por pena? Creo que no. Entonces, lo que deberías hacer cuando un hombre te deja es dejarlo también: dejarlo en paz.

No busques contacto con tu ex: no le llames, no le envíes emails ni mensajes ni tarjetas de felicitaciones en Navidad.

No vayas a su casa ni a su trabajo; no pasees a tu perro en los sitios donde suele ubicarse tu ex pareja.

Ningún contacto. Nada de nada. Como si ya no existiera.

Sé que en tu mente solo estará él. Mil veces al día lucharás por no sucumbir ante las ganas de oír su voz, de preguntarle cosas —quién sabe si no haya cambiado su opinión— o de saber cómo le va.

Pero créeme: si haces una llamada y llegas a hablar con él, lo único que habrás conseguido es sentirte peor.

Porque no habrá cambiado nada, solo le darás más pena a él —« ¡Ay, pobre! No puede sin mí…»— y a ti misma.

Es como cuando quieres perder peso y sabes que no deberías comer pastelitos, pero te permites un almuerzo dulce y después te sientes peor, arrepintiéndote por no tener el valor de no hacer aquello que no debes.

Así que no cedas a la tentación de oír su voz o verlo: te sentirás aún más dolorida cuando él te repita que entre vosotros todo se acabó.

Respeta su decisión. El dijo que ya no quería estar contigo, no puedes obligarlo a hacer lo contrario. Si quieres que él te respete, respeta su decisión.

Si vas a perseguirlo, llamándolo, buscando contacto con él, lo único que vas a conseguir es que él piense: « ¡Qué pesada!» o «Uf, ¡cómo me quiere!» Sí, eso le ayudará a subir su autoestima, pero la tuya bajará. Por tanto, mi consejo para ti es: déjalo en paz.

Si puedes dejarlo en paz, te sentirás más fuerte y te recuperarás del dolor mucho antes.

Además, dándole todo el espacio, eliminándote totalmente de su vida, le darás la oportunidad para ver lo que de verdad significa vivir sin ti. Quizá así cambie de opinión y quiera volver contigo. No hay que tener muchas ilusiones, pero esto a veces pasa. Que aceptes o no su regreso ya es otro tema; lo veremos más adelante. Sea como fuere, te aseguro que esto nunca va a pasar si lo persigues. Así que, déjalo en paz.

Sí, no es nada fácil, ¡pero vale la pena!

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